miércoles, 11 de marzo de 2015

Dejemos que el silencio nos destroce

No, no insistas, no hagas esa revolución en mí, aunque lo desee, aunque la necesite, pero no, aléjate, no sigas, porque sufriré, sufriré al sentir esa libertad, ese ambición de querer tenerte un poco más, sí aléjate, ya sé que "me rompes cada vez que me acaricias".
No pretendas que vuelva, que te diga que eres la primera, y que comencemos como si nada hubiera pasado.
No utilices tu cuerpo para volverme a atar, no vuelvas a clavar esa mirada en mis labios, haz que no se te note, vivamos de sombras tal vez...
Pero y qué, y qué si sé que volverás, que volveré, pero sin saber si realmente todo esto es una falsa, haciéndome convencer que esto es algo que nace y se apaga.
No más, aunque muera por besarte, no más, y qué más dará si necesito de ti, y qué si las canciones me recuerdan a ti, o si ese olor hace ponerme el corazón a mil, no importa, hoy no importa nada...
La verdad, prefiero que nunca sepas la verdad,
aunque muera por decirlo,
un último adiós,
reencarnación tal vez,
a veces sufrir es para los valientes, y yo solo he sido alguien que se emociona al oír tu nombre.


No hay comentarios:

Publicar un comentario